Ha sido valerosa la actitud del señor alcalde de Pitalito, Pedro Martín Silva, para enfrentar a los empresarios que están pasando diariamente petróleo procedente del Putumayo por vías huilenses, en cientos de carros-tanque, al haber emitido un decreto que restringe esa actividad en su municipio si no se hace con las medidas preventivas y de contingencia requeridas: Es recurrente el derrame de ese crudo que pone en peligro la salubridad de la gente al caer hasta en los ríos, y ese tránsito pesado está deteriorando diariamente la infraestructura vial.
Es grave lo que está sucediendo por los lados de Pitalito y otros municipios, pues los empresarios de esa actividad se creen con el poder suficiente para transportar el hidrocarburo con mucho riesgo sin que las autoridades locales puedan hacer lago contra ese peligro.
Pero les ha salido un mandatario con carácter y que quiere defender, en suma, el bienestar de los huilenses y proteger el medio ambiente. Pero el alcalde de Pitalito se siente solo, la policía lo está desconociendo como la primera autoridad municipal que la Constitución y la ley establece, al parecer la policía no está dispuesta a cumplir las órdenes que él imparte y, por si fuera poco, la directora de Transporte y Tránsito del Ministerio le quiere hacer el juego a los que transportan ese crudo.
Y lo más grave, es que lo han puesto a sudar petróleo, ya que ha hecho público el temor que siente por su vida ante esa valerosa, legal y legitima actitud que ha tomado por defender el interés general de los habitantes de Pitalito y de los huilenses. Ante este hecho, es un deber del Comandante de la Policía del Huila pronunciarse al respecto, que le diga a los huilenses porqué están desconociendo la autoridad del alcalde de Pitalito. Igualmente, es un deber del Gobernador del Huila exigirle a la policía que cumpla con su deber como lo ordena la ley, y que explique qué medidas está tomando ante ese irregular transporte de crudo y el apoyo que le están ofreciendo al alcalde de Pitalito. Hay que reconocer que la CAM ordenó la suspensión de esa actividad a 19 empresas porque no cumplen requisitos para ejercerla; sin embargo, y de acuerdo al principio de coordinación, falta más trabajo en equipo de varias autoridades para evitar más daños. No sobra decir, que los organismos correspondientes tienen que garantizarle la vida íntegra al alcalde en mención, porque a veces criticamos a los mandatarios cuando no hace lo que les compete, pero cuando hacen lo correspondiente hasta su vida se pone en juego.